La participación ciudadana es, sin duda, un elemento esencial para el éxito de la implementación de estrategias a nivel nacional en el Perú y en cualquier otro país. Cuando los ciudadanos participan activamente en el proceso de toma de decisiones, se fortalece la legitimidad de las políticas y programas gubernamentales, se promueve la transparencia y la rendición de cuentas, y se asegura que las soluciones propuestas sean más representativas de las necesidades y deseos de la población. En el contexto peruano, la participación ciudadana puede contribuir significativamente a abordar desafíos sociales, económicos y políticos, y a fomentar un sentido de responsabilidad compartida entre el gobierno y la sociedad civil.